Tener el álbum más vendido ya no importa tanto .

Las 44.000 unidades vendidas del sexto álbum de la banda Cake, "Showroom of Compassion", marcaron la segunda semana consecutiva en que el álbum número uno alcanza un nuevo mínimo de ventas. La clasificación de la semana pasada estuvo encabezada por "Speak Now" de Taylor Swift, que vendió solamente 52.000 copias, de acuerdo con Nielsen SoundScan.

La cantante Taylor Swift

El mediocre desempeño del álbum de Cake fue doblemente notable: el álbum de Swift había estado en la lista de mayores ventas durante casi tres meses antes de anotar el mínimo. El de Cake,en cambio, acaba de salir el mercado, lo que transforma su desempeño en la clasificación difundida el miércoles en el peor debut en la historia de los número 1 de Billboard. Como ocurre con las películas y los DVD, muchos o la mayoría de los álbumes de música logran sus mayores ventas en su primera semana en el mercado y luego retroceden rápidamente.

Los primeros tres meses del año son habitualmente lentos para la industria de la música, luego de los lanzamientos de noviembre y diciembre que buscan aprovechar las ventas de la temporada navideña. El anterior mínimo había sido establecido en 2007, con la banda sonora de la película "Dreamgirls", que vendió 60.000 copias durante una semana a mediados de enero.

En contraste, durante la segunda semana de enero de 2004, el álbum número 1(el doble de Outkast "Speakerboxx/Love Below, que incluía el éxito "Hey Ya") vendió más de 97.000 copias.

La tendencia es parte de una caída generalizada en la venta de música grabada. El año pasado, los consumidores estadounidenses compraron 362,2 millones de álbumes de música en CD o en descargas digitales, la menor cantidad desde que SoundSand comenzó a difundir las cifras en 1993, que además representó una caída de 58% frente al máximo de 2000.

Para el tipo de canciones pop que normalmente lideran las ventas anuales, los tiempos de auge se están volviendo un lejano recuerdo. En 2000, el álbum "No Strings Attached" de N'Sync's vendió cerca de 10 millones de unidades solamente en Estados Unidos. El disco de Eminem "Recovery" encabezó las ventas del año pasado con 3,4 millones de copias.

Las descargas pagadas de canciones se estabilizaron en 2010 al llegar a 1.170 millones, una ligera alza frente a los 1.160 millones de 2009.

Para compensar esa caída, los grandes sellos han creado divisiones "de servicios para artistas" que ayudan a las bandas a generar más ingresos de la venta de productos y de entradas para sus conciertos, a cambio de un porcentaje de ese negocio. Pero esos negocios representan una porción mínima de la facturación de la mayoría de las grandes casas discográficas, dicen fuentes de la industria.