Vendan los bienes del estado para achicar el déficit presupuestario de California

8 de May, 2008

El gobernador Schwarzenegger, frente a nuevas montañas de número rojos, está intentando conseguir apoyo para su propuesta de reformar el presupuesto del estado.

Ante el pronóstico de un déficit cercano a los 20 mil millones de dólares, Schwarzenegger ha solicitado la autorización del legislativo para endeudarse por 3.300 millones mediante la emisión de un nuevo bono, y desea posponer el pago de una deuda de 1.500 millones. Su propuesta de presupuesto 2008 también contempla un listado de recortes de gastos.

Existe otra opción. California está sentada sobre una mina de oro de tierra ociosa que podría ser vendida a cambio de dinero en efectivo. Según la división inmobiliaria del Departamento de Servicios Generales, al 2 de enero, el propietario del gobierno estadual, los contribuyentes, era dueño de 22.727 edificios y más de 6,700.000 acres de tierra en 2.313 localidades.

A fines de 2002, el año más reciente respecto del cual existe información disponible, 55 propiedades estaduales que abarcan casi 4.811 acres han sido declaradas ociosas. Así y todo, hasta octubre pasado, estaban siendo activamente solicitadas cotizaciones sobre apenas tres propiedades: una estación de la Patrulla de Caminos en el área sur del Lago Tahoe, 2,7 acres de una parcela de 20 acres en el Los Angeles Reception Center y 17,6 acres en el Condado de Santa Clara en el Bay Area Research and Extension Center.

La última transacción de propiedad sobrante de alguna significación parecería haber ocurrido en el año fiscal 2002, cuando el estado vendió 152 acres en el Condado de Santa Clara por $149 millones. Esa parcela era parte de una propiedad de 292 acres que había sido declarada excedente en 1996.

En justicia, la disposición de los bienes puede estar demorada por la burocracia o enmarañada en arrendamientos de largo plazo. Pero casi nada parece haber cambiado desde 2000, cuando el auditor del estado criticó al departamento por fallar en disponer oportunamente de la propiedad ociosa valuada en millones de dólares.

La disposición de la propiedad “sobrante” es tan solo un punto de partida. Los gobiernos estaduales y locales de todo el país poseen y a menudo operan emplazamientos deportivos profesionales, centros de convenciones y otras instalaciones públicas que podrían generar miles de millones en ingresos si fuesen vendidas o alquiladas al sector privado.

Debido a la crisis inmobiliaria, este no es el mejor momento para vender. Ese es el precio por haber dejado de actuar cuando los valores de la tierra se encontraban altos.

Pero California y otros estados que enfrentan déficits presupuestarios no tienen que obtener ganancias; tienen que poner en orden sus finanzas. La disposición de la propiedad sobrante es una solución parcial y de corto alcance. La respuesta de largo plazo es la reforma presupuestaria y la contención del gasto.

Traducido por Gabriel Gasave

  • es Asesor de Investigación Distinguido en el Independent Institute y Profesor J. Fish Smith de Public Choice en la Utah State University.

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