Se parece a Pinochet

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La expresión no es mía. Es de un partidario de Chávez, Rafael Uzcátegui, Secretario de Organización del PPT, y dice textualmente: “Esta Ley Electoral se parece a la que dejó Pinochet en Chile” (1).

Al referirse al inconstitucional Proyecto que se encuentra en la Asamblea Nacional y que con manos alzadas en forma de aplanadora se aprobó en primera discusión.

Este Proyecto “es un paso atrás”. “Es un terremoto de magnitud 6 en la escala de Richter, comienza a generar consecuencias y daños difícilmente reparables. Esta ley puede generar daños a la democracia porque institucionaliza formas que limitan la representación de las minorías y los mecanismos de opinión de la gente.

Este sismo sería de más de 6 en la escala de Richter. No puedes matar al otro, tienes que matar a todos y son muchos. Esto puede ser como una olla de presión (2)

Esto lo grafica Carlos Genatios, exministro de Ciencia y Tecnología (1999-2002) Uzcátegui se explaya en otras consideraciones. Unas se refieren a la copia del modelo soviético; otras al PSUV que “es un partido de tendencias silentes, que es más peligroso. No son tendencias frescas para el debate”.

Este proyecto cuenta con la aprobación de los 4 Rectores incondicionales que forman la mayoría en el C N E. Estos Rectores llegan al colmo de negar elecciones, referéndum, hasta tanto se apruebe este adefesio que termina de darle una voltereta a los procesos electorales no sólo negando la representación proporcional garantizada por la Constitución, sino convirtiendo en articulado todas las trampas que el oficialismo emplea en las consultas electorales.

Niega la entrega del REP, puede modificar los circuitos a conveniencia, facilita las morochas, deja en el limbo la observación internacional y de paso decimos que las recomendaciones del Centro Carter, del Parlamento Europeo, del Ojo Electoral, entre otras, son echadas al cesto de la basura. U

zcátegui increpa a los “aprobadores” “compañeritos de partido” como diría Omar Pérez: Ali Rodríguez. Aristóbulo Isturiz, Müller Rojas y María Cristina Iglesias- El estudio de la historia me ha enseñado que ninguna lucha se pierde cuando le asiste la razón. El combate por la libertad, la democracia y la justicia social, en una palabra por la democracia social, está en armonía con un corajudo, masivo y unitario rechazo a este adefesio. Unir a todos aquellos que estén en contra de él y quieran elecciones libres, con representación plural, con respeto a la Constitución.-Esta exigencia es para ahora, y para siempre.