Actuación
¿Cómo actúa la voz única? ¿En base a qué? ¿Cuáles son sus tácticas? ¿Cuál su estrategia? Veamos este aspecto a la luz, sobre todo, de la actuación internacional.
Espero que ante la evidencia de sus realizaciones y pronunciamientos en materia internacional, recogidos por innumerables medios de comunicación, a ningún observador le quede la menor duda de que la base, las motivaciones, de esas realizaciones es la “guerra”, un conflicto bélico preferiblemente con justificación internacional. Lo busca desesperadamente. Quiere y desea llevar a los venezolanos a una guerra, a una confrontación. Parece que es su único motivo para actuar. Guerra interna y guerra externa. Todo lo contrario a nuestro espíritu y sentimiento nacional y a las disposiciones constitucionales y legales. ¿Pero quien lo acusa, juzga y castiga?
¿Por qué eso de la guerra? Porque desea, en primer lugar, perpetuarse en el poder. En segundo lugar, establecer y defender su “revolución” a costa de lo que sea. ¿A quien imita? Tal vez a un padre político que tiene en su imaginación, entre pecho y espalda. Stalin, Lenin, Mussoline, Hitler, Fidel, Pinochet, Gómez, Bolívar, Pérez Jiménez, los Monagas, Boves, solo el lo sabe. Y, sobre todo, carece de originalidad. Todo es una mala copia, un “guacho” mal tomado, como aprendió y/o le enseñaron. Así lo repite.
¿Durante casi nueve años se ha ocultado, incluso por individualidades versadas y en aparente oposición y otras a su lado, hasta la vida castrense, su desenvolvimiento como cadete, como militar? ¿Están claras sus actuaciones, su nacionalismo, su patriotismo, su integridad, su valentía y, sobre todo, las administrativas y de jefatura y decoro en los lugares en donde fue destacado? ¿Sus explicaciones y cuentos mediáticos convencen? ¿Hay, aun, zonas oscuras, no claras de sus trabajos antes del golpe contra la republica, contra el pueblo? ¡Un golpe de estado con sangre! ¡Gran antecedente, ahora y por ahora!
Se jacta, a cada momento, de su amor por el pueblo, de que cuanto hace es a favor y para el pueblo. Una posición de “perdonavidas”. Una posición de “dar”, como si cuanto administra es de su propiedad personal y no colectiva, como si él alguna vez produjo algo, hubiese vivido de su trabajo, cuando vivió del estado, del gobierno. Su ya probado, en estos casi nueve años de gobierno, falta de criterio para el equilibrio, la tolerancia y la búsqueda de la paz y convivencia para los nacionales. Todas sus fallas se las atribuye a sus enemigos, al imperio del norte. Es su panacea. Es su escudo. Es su escondite preferido.
Sus cadenas mediáticas están llenas de logros que no observamos en la realidad, solo en números y gráficos de una sola fuente y sin posibilidades de verificación; pero que las estadísticas y números internacionales de diverso origen corrigen, a cada momento, hacia la baja en la mayoría de los items, hacia lo negativo, hacia el fracaso. Todavía no reconoce su casi nula productividad en todo; no reconoce que está llevando el país a la barbarie.
Busca, con ansiedad, una victoria internacional. Un reconocimiento en cualquier ámbito para que repercuta, incluso, internamente. Por eso sus intromisiones en Argentina, Bolivia, Ecuador, Nicaragua, el Caribe, etc. Por eso sus acciones en Europa, África y Asia. Por eso sus repartos y dadivas a otros pueblos de cuanto no es de el, sino del pueblo venezolano a quien se lo quita y a quien deja sin recursos. Por eso su incursión como mediador ante las guerrillas cuanto no hace por los nacionales como si pudiera engañar al mundo entero. ¿Qué saldrá de una reunión en donde uno combate militarmente a las guerrillas y otro las defiende y aupa con ayuda de la isla de la felicidad y dejando en libertad “supuestos” magnicidas e insurrectos? Patético.
¿Cuál es su táctica? Una sola: Conservar el poder, todo el poder, para él solo. Mantener bajo su dirección y autoridad a todo el país. Es la única garantía frente a lo internacional y para realizar “su” revolución, la cual está solo en su mente. La economía debe estar en manos del Estado, que es la voz única, él, solo él. Estado totalitario. Por eso la reforma a la “bicha” como bloque. Poder, economía, militar y social.
Su única base de actuación, a mi manera de ver su desenvolvimiento político, es la guerra, sin ella no es posible “su” revolución. ¿Y usted lo dejara que nos lleve a una guerra? NO y NO al socialismo de la voz única. NO al comunismo de la voz única. NO a la reforma de la voz única. ¿Por qué no desautorizamos a quienes están actuando en nombre del pueblo para quitarnos la libertad, los bienes, la democracia, la republica, la vida? ¿Cuál es su finalidad en este cuasi gesto humanitario? ¿Quién se como ese caramelo envenenado?
“La guerra es la salida cobarde a los problemas de la paz”, Thomas Mann, 1875-1955, Escritor alemán.
Caracas, Venezuela, 29/08/07.
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